30 de Ago de 2018
Considerando que la construcción del Proyecto Aquarela Multifamiliar afecta de manera irreparable el factor paisajístico y arquitectónico del Castillo de San Felipe de Barajas y pone en peligro la declaración como Patrimonio Histórico de la Humanidad, la Sociedad de Mejoras Públicas de Cartagena - SMPC coincide con el informe y recomendación,
para la UNESCO, de la Misión de Asesoramiento del Consejo Internacional de Sitios y Monumentos (ICOMOS), en el que se recomienda desarrollar una evaluación de impacto en el patrimonio para identificar y medir el efecto del proyecto Aquarela, detener indefinidamente su construcción y demoler lo que se ha construido hasta el momento.
Es así como la institución concuerda en que la única alternativa jurídica, ambiental, paisajística y conservacionista del patrimonio de nuestra ciudad es la demolición total y absoluta de la construcción adelantada en el proyecto de vivienda multifamiliar Aquarela, el cual se adelantó a solo 100 metros del Castillo de San Felipe de Barajas y la revocatoria de las licencias otorgadas a la constructora.
Para la Sociedad de Mejoras Públicas de Cartagena, entidad que asumió su recuperación desde 1928 hasta 1966, luego de encontrarlo cubierto de maleza, destruido y saqueado para la construcción de nuevas edificaciones, y luego de su recuperación, logró que el Gobierno de Colombia lo incluyera como un Bien de interés Nacional por ser la mayor y la más importante fortaleza construida por España en América, éste debe ser protegido de obras que afecten su valor Excepcional Universal, incluyendo el paisaje vinculado a todo el sistema fortificado.
La SMPC ha venido siguiendo el caso y es así como mediante acción popular radicada en el Juzgado Décimo Administrativo Oral del Circuito, en el mes de febrero de 2018, coadyuvó la demanda presentada por el Ministerio de Cultura en la que se solicitó la suspensión inmediata de la ejecución del proyecto y sigue apoyando todas las acciones que se generen para proteger el patrimonio y declarar la vulneración y afectación de los derechos colectivos al Patrimonio Cultural de la Nación, la moralidad administrativa y goce del espacio público.
Para esta institución que durante 88 años tuvo como principal responsabilidad la custodia del patrimonio fortificado de Cartagena, es urgente que la ciudad se comprometa a velar por la protección de todos y cada uno de los bienes culturales y naturales existentes dentro de su territorio, especialmente si esos bienes fueron catalogados como patrimonio cultural de la humanidad por parte de la propia UNESCO.
Bienes como el Castillo de San Felipe de Barajas tienen una especialísima protección por parte del Estado, en consideración a su importancia histórica, arquitectónica y paisajística tanto para el Distrito de Cartagena de Indias, como para el Estado colombiano, es por ello que la normatividad aplicable para garantizar su protección y cuidado, ostentan una mayor jerarquía y priman sobre las demás normas.