Claudia Navarro Díaz, una amante de Cartagena y su patrimonio

Para Claudia Navarro Díaz, Cartagena es la cuna de su cultura y la razón de ser de su elección de vida. A sus 44 años, vividos en su mayoría en Cartagena, afirma que la elegiría mil veces más como su lugar para nacer, vivir, tener a sus hijos, trabajar y permanecer.

Esta cartagenera, historiadora de profesión, eligió esta carrera porque encontró en ella su forma ideal de contribuir al desarrollo de la ciudad. Se declara amante del patrimonio inmaterial de Cartagena, reconoce su valor y fortalezas y se dedica a trabajar, desde la historia y la cultura, por una mejor ciudad.

Esposa de Fernando José Cantillo y mamá de José David, Rosa Angélica y Sebastián, hoy ve en su familia el motivo e inspiración para convertir a Cartagena en el mejor vividero del mundo. Convertirse en madre la llevó a entender que ahora hay seres que esperan mucho de ella y por ellos se ha propuesto ser una mejor persona, profesional y ciudadana, y hacer lo que esté en sus manos para que su ciudad y entorno puedan brindarles lo mejor. Es una convencida de que la cultura es una excelente ruta de camino y desde su trabajo hace camino al andar.

Claudia tiene una amplia experiencia en temas de historia y cultura, realizó un posgrado en Economía e Historia de la Universidad de Los Andes, manejó las comunicaciones virtuales en temas de historia del Banco de la República y estuvo en el Congreso, liderando temas culturales.

También se destaca su experiencia en la Escuela Taller Cartagena de Indias, en la que trabajó de cerca con patrimonio material e inmaterial y desde su gestión les dio realce e importancia a las fortificaciones desde el punto de vista histórico.  Para ella, la formación en oficios tradicionales hace parte del patrimonio inmaterial, por eso durante su administración ETCAR graduó 604 estudiantes, convirtiéndose en la primera promoción en su historia, un gran paso para la cultura el Cartagena y un cambio que empieza a gestarse en la forma de mantener el patrimonio.

Hoy es Gerente de Cultura de la caja de compensación Comfenalco; un cargo que le ha permitido fomentar la cultura con acciones de transformación, mediante el trabajo con jóvenes talentosos de estratos 1, 2 y 3 facilitando su acceso a becas en Estados Unidos para estudios de Música y Cultura, una oportunidad única para muchos soñadores de obtener una mejor calidad de vida, potenciar sus competencias y hacer del talento cartagenero un producto de exportación y orgullo.

Esta experiencia como gestora le ha dado la satisfacción profesional y personal de sentir como hijos a sus pupilos y la convicción de que esta es una manera de transformar la ciudad, apoyando a los talentos y la cultura.

Cartagena, desde sus ojos

Claudia ve a Cartagena como un escenario cultural de alto nivel, su agenda permanente de eventos de talla nacional e internacional lo ratifica, pero en su concepto, esta gran fortaleza debe ser potenciada a través de una sinergia que integre los intereses independientes; eso haría posible que pasara de ser un escenario de espectáculos culturales, a ser una gestora cultural per se de escenarios culturales.

La cultura y el legado patrimonial son la fortaleza de Cartagena para Claudia, por eso cree que es indispensable promover la cultura como motor de desarrollo.  Está convencida de que la formación en cultura y emprendimiento cultural haría la diferencia entre los cartageneros. Todo es cultura, esta es una forma de sentir y concebir la vida.

Al servicio de la SMPC

Se declara “fan” de la Sociedad de Mejoras Públicas de Cartagena, lleva muchos años como investigadora de la historia, admirando y observando muy de cerca el trabajo de la institución. En la administración de Pedrito Pereira fue delegada para pertenecer a la Junta Directiva de la institución, lo cual la llevó a vincularse como socia. 

Para Claudia, el trabajo de la Sociedad de Mejoras Públicas en Cartagena tiene una labor más loable que en cualquier otro territorio, ya que su enfoque hacia el desarrollo urbano compromete las fortificaciones, mucho más que arquitectura, piedra o urbanismo: la conservación del valor de las murallas, baluartes, castillos y el patrimonio histórico y cultural de Cartagena, durante casi un siglo. La sociedad existe antes de la creación de Secretarías como la de Infraestructura, entre otras dependencias transversales al desarrollo urbano y cultural, y se ha mantenido 97 años haciendo historia y cuidando la historia.

“Es una institución que debe tener el reconocimiento y la importancia al seguir armando ese mapa de desarrollo urbano de la ciudad, pues siempre ha tenido capacidad de ver hacia el futuro”, afirma. Por otra parte, le apasiona hablar de ello porque el desarrollo de Cartagena se le debe a la Sociedad y toda su visión hasta hoy fue dada desde la SMPC desde sus inicios.

Desde su nuevo lugar, como socia de la SMPC, espera contribuir en la recopilación de conocimiento, a través de la revisión y exploración de archivos para seguir ayudando a la administración a articular muchos proyectos. “No somos solo murallas, también somos barrios, patrimonio inmaterial y quiero estar aquí porque quiero seguir ayudando a que se cumpla la misión de la Sociedad”, agrega

A Claudia se le nota la pasión por su oficio y el gran amor por su ciudad, una combinación perfecta de sentimientos, el combustible necesario para trabajar sin cansancio por una verdadera transformación.

Todos los cartageneros tenemos un saber, cualidad o don para poner al servicio de la ciudad: Claudia es una historiadora que, además de ser una gran conocedora del pasado, tiene una visión prodigiosa del futuro, y para la SMPC es un honor y verdadero gusto contar con ella.

¡Bienvenida!